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El Audemars Piguet Social Club es un evento anual organizado por la Manufactura. Sirve como plataforma para presentar los últimos lanzamientos e innovaciones de la marca a un público selecto, que incluye periodistas, coleccionistas y expertos del sector. El evento es conocido por sus presentaciones exclusivas y creativas que destacan la artesanía, la evolución del diseño y los avances técnicos de Audemars Piguet.
A diferencia de las ferias de relojería tradicionales, el AP Social Club es una experiencia más íntima y cuidada, que a menudo se celebra en lugares únicos, que reflejan el patrimonio de la marca o su espíritu vanguardista, como Le Brassus (Suiza), donde tiene su sede la empresa, u otros lugares de importancia cultural como Milán. Es una forma de que Audemars Piguet conecte con su comunidad —de ahí el apodo de «club social»— mientras presenta nuevas incorporaciones a colecciones como Royal Oak, Royal Oak Offshore y CODE 11.59, a menudo con un enfoque en materiales innovadores, complicaciones o actualizaciones de diseño.
Una vez más, el APSC 2025 —celebrado en su sede histórica de Le Brassus— no defraudó. Y no iba a ser diferente, dado que este año la firma celebra su cumpleaños 150. ¡Y vaya que lo hizo en grande! Basta con ver la primera gran novedad del año: la reinvención de su calendario perpetuo ultradelgado.
CALENDARIO PERPETUO CAL. 7138
Para marcar el comienzo de las celebraciones de su 150 aniversario, Audemars Piguet presentó una nueva generación de movimiento automático con calendario perpetuo, el Calibre 7138. Este no es el reloj de su abuelito; es una maravilla moderna y elegante en la que todo se ajusta a través de una sola corona.
En la actualidad, los calendarios perpetuos siguen tradicionalmente el curso de las estrellas con magia mecánica, pero pueden ser un engorro a la hora de ajustarlos, gracias a esos incómodos correctores laterales y el riesgo de lastimar la caja si no se es cuidadoso. AP dijo: «No, mejor simplifiquemos». ¿Su solución? Una corona que lo hace todo, respaldada por cinco patentes.
¿Y cómo opera esto? En la posición natural de la corona se le da cuerda; luego, se saca a la segunda posición para ajustar la fecha y el mes (en diferentes sentidos de giro, desde luego); se vuelve a sacar a la posición exterior para ajustar la hora; finalmente —y aquí está una buena parte de la magia— se regresa a la posición intermedia para ajustar el día y las fases lunares. Es un esquema suave, intuitivo y esconde una ingeniería muy inteligente: palancas y ruedas giratorias que trabajan juntas como dos enamorados bailando un tango. Dos de las patentes del 7138 se aplicaron a los trucos de la corona, convirtiéndola desde ya en una pieza destacada en el mundo de los relojes y en el nuevo capítulo de los calendarios perpetuos.
Audemars Piguet ha estado jugando al Tetris de esferas con el Calibre 7138, y el resultado es un calendario perpetuo tan fácil de ver como de leer. Han barajado las subesferas en una hábil alineación de izquierda a derecha —día a las 9, fecha a las 12, mes a las 3— sirviendo el formato que solemos usar en Latinoamérica (día, fecha, mes) como un platillo impecablemente presentado. No se trata sólo de funcionalidad; esta disposición aporta simetría y un aire estético fresco que es caramelo puro para la vista.
Los números de la semana siguen en el bisel interior, pero la novedad es que ahora la semana «1» comienza a las 12 en punto, en lugar de la antigua semana 52. También han sincronizado el «lunes» y el «1» para que se alineen al mediodía en sus subesferas, marcando la semana y el mes con un chasquido satisfactorio. ¿Y la fecha a las 12 en punto? Cuenta con un resplandor patentado: una rueda de fecha de 31 dientes personalizada en la que cada diente tiene el tamaño justo para coincidir con los dígitos, lo que hace que cada número resalte sin necesidad de entrecerrar los ojos. Para equilibrar, la subesfera del mes y del año bisiesto a las 3 en punto tiene un espejo a juego con un indicador de 24 horas escondido en la subesfera del día a las 9 en punto. ¿Simetría? Perfecta. También hay una práctica zona roja de «no corrección» entre las 9 de la noche y las 3 de la madrugada; si usted intenta ajustar el reloj en ese momento, el reloj lo va a ignorar. Abajo, a las 6 en punto, la fase lunar se mantiene en su sitio, mostrando un retrato lunar capturado por la NASA tan real que juraría que está brillando. La luna llena se ha alineado con las 12 en punto, uniendo toda la esfera como el lazo de un regalo. Aquí todo es claridad y encanto: AP ha convertido una complicación compleja en una delicia visual.
Esta maravilla se presenta en un CODE 11.59 de 41 mm en oro blanco de 18 quilates —pura elegancia en azul— y dos modelos Royal Oak de 41 mm, uno en acero y el otro en un nuevo Sand Gold (oro arena) que obsequia tonos y reflejos cual una puesta de sol veraniega. El trío de versiones «aniversario» de edición limitada —150 piezas cada una, naturalmente— están salpicadas de sutiles detalles que recuerdan 150 años de artesanía de primera categoría. Es como una pequeña nota de agradecimiento al legado de AP, grabada directamente en el diseño.
Audemars Piguet fusiona su rica historia con un espíritu progresista, convirtiendo una complicación clásica en algo que se adapta al estilo de vida actual. Es práctico, es precioso y es la prueba de que siguen estando en lo más alto después de siglo y medio.
ROYAL OAK CALENDARIO PERPETUO DE ANIVERSARIO
Continuando con el tema de los calendarios perpetuos, esta nueva pieza sirve tanto como un elemento celebratorio como un homenaje histórico. El Royal Oak Perpetual Calendar Openworked “150th Anniversary”, de edición limitada, refleja el rico legado de la marca en materia de diseño, materiales y exploración técnica. Este reloj es el último equipado con el Calibre 5135 y se despide con elegancia del movimiento que ha animado los relojes de pulsera con calendario perpetuo automático de 41 mm de la Manufactura durante casi una década. Fue justo el movimiento 5134, nacido en 2015, el que pavimentó el camino de éxito del ya legendario y súper esbelto 5135, que debutó en 2019.
Para poner en diálogo el pasado y el presente, los códigos de diseño de la carátula de esta edición limitada se inspiran en un histórico reloj de bolsillo calendario perpetuo calado (Ref. 25729), expuesto en el corazón del Musée Atelier Audemars Piguet. Dotado de una esfera de zafiro, el nuevo reloj de dial calado da protagonismo al movimiento que late en su interior. El bisel interior y las esferas secundarias reinterpretan la estética contrastada del reloj de bolsillo original con una rica tonalidad azul ligeramente oscurecida para armonizar con el profundo color de las manecillas de a juego en oro blanco de 18 quilates, rellenas de material luminiscente para una legibilidad óptima. En la misma línea, los índices se han realizado en un tono gris plateado y con una refinada forma redonda que refleja la de los diamantes talla brillante del reloj histórico. La tipografía blanca utilizada para las indicaciones numéricas y alfabéticas del calendario perpetuo también se ha revisado para conferir a la esfera una estética elegante y vintage.
Para realzar su atractivo atemporal, la combinación de alta tecnología de titanio y cristal metálico a granel (BMG) de la caja y el brazalete de este modelo crea un sofisticado contraste con la estética vintage de la esfera, inspirada en el mencionado reloj histórico del museo. Esta elegante edición limitada, de 150 piezas, está adornada con códigos de diseño desarrollados específicamente para el aniversario que se extienden a otras piezas de la oferta de este año, celebrando el compromiso duradero de la Manufactura con la tradición relojera y la innovación.
CERÁMICA MÁS RICA
Durante 150 años, Audemars Piguet ha sido el maestro de combinar el arte de la vieja escuela con la tecnología de vanguardia, ampliando los límites de lo que puede ser un reloj mientras mantiene un pie firme en la tradición. Ahora, los magos suizos lanzan dos nuevos cronógrafos automáticos Royal Oak Offshore que llevan la historia de amor de la colección con la cerámica al siguiente nivel.
La cerámica industrial apareció en Audemars Piguet con la colección Bamboo en 1986, dada la creciente exploración de materiales de alta tecnología. Con su mezcla de tradición e innovación, la colección ofrecía diferentes modelos con brazaletes bicolor que reunían el oro engastado con diamantes con los eslabones de cerámica en rojo, blanco o negro.
Con el cambio de milenio, nuevos materiales y aleaciones procedentes de ámbitos técnicos (tales como los deportes extremos) se abrieron paso en la alta relojería introduciendo una diversidad de colores y nuevas estéticas. La cerámica, antes valorada principalmente por sus cualidades prácticas, adquirió un nuevo reconocimiento y evolucionó hasta erigirse en un símbolo de diseño y habilidad técnica. La colección Royal Oak Offshore se convirtió en la plataforma perfecta para la experimentación con este material. En 2006, Audemars Piguet lanzó el Royal Oak Offshore Rubens Barrichello Cronógrafo II, el primer reloj dotado de bisel, corona y pulsadores de cerámica negra. Ahora disponible en colores blanco, negro, marrón, azul, verde y gris, la cerámica sigue impulsando los límites conocidos tanto en términos funcionales como estilísticos, lo que refleja el persistente compromiso de la marca con la exploración de los materiales combinando tradición e innovación.
Volvamos a los nuevos Royal Oak Offshore cerámicos. El primero es un robusto modelo deportivo de 43 mm que luce un aire tricolor: una caja de cerámica negra combinada con un bisel, corona y pulsadores de cerámica verde, sí, una novedad para este tamaño. Los detalles en titanio, como el fondo de la caja y los pasadores del brazalete, resaltan sobre los tonos oscuros, añadiendo un elegante contraste. La esfera también es impresionante, con el último patrón «Méga Tapisserie» en PVD verde oscuro, un bisel interior negro y contadores en forma de caracol a juego a las 3, 6 y 9 en punto. Las brillantes manecillas de oro blanco de 18 quilates y los marcadores en gris plateado lo mantienen nítido, mientras que el calibre 4401, la última magia cronográfica de AP —con funcionalidad flyback—, muestra sus intrincados engranajes a través de una ventana de zafiro y titanio en la parte posterior. Con un sistema de brazalete intercambiable, viene con una correa de cuero verde oscuro y una de caucho negro de regalo, lo que duplica ese toque atlético.
Luego está el impresionante segundo modelo, una hermosa criatura de cerámica negra de 42 mm con un brazalete integrado a juego, que apuesta por la potencia discreta. El aspecto monocromático lo mantiene limpio, roto solo por ocho tornillos hexagonales de acero y el icónico monograma AP. La carátula refleja esa vibración con un patrón «Méga Tapisserie» ennegrecido, realce y contadores azuleados a las 6, 9 y 12 en punto, todos tratados con un elegante acabado galvánico. Los subregistros de cronógrafo gris oscuro y una escala taquimétrica añaden profundidad, mientras que las manecillas e índices de bastón de oro blanco de 18 quilates ennegrecidos, recubiertos de lúmenes grises, aportan un brillo discreto. Dale la vuelta y la refinada mecánica del Calibre 4404 —también un cronógrafo flyback— brillará a través del fondo de zafiro de la caja.
La cerámica se lleva todo el protagonismo: ligera, resistente a los arañazos y dura como una roca, combina la dureza industrial con el pulido característico de AP. Estos Royal Oak Offshore no solo dan la hora, sino que cuentan una historia de innovación, durabilidad y un legado que sigue ardiendo después de siglo y medio.
CODE 11.59 FLYING TOURBILLON 38 MM
Cerramos esta entrega de novedades del AP Social Club 2025 con una nueva ejecución del elegante CODE 11.59 en 38 mm y con tourbillon volante. Esta nueva propuesta continúa la expansión de complicaciones dentro de la gama nacida en 2019, confirmando su versatilidad a la vez que sirve de reto a los relojeros de Le Brassus para ampliar las posibilidades de la moderna horología de AP.
Primero hay que decir que el CODE en 38 mm es verdaderamente cool. Los modelos referenciales vienen en 41 mm, pero esta talla menor le da un giro al reloj, no sólo porque los hace más interesantes para los coleccionistas que deploran los tamaños grandes de los relojes, sino porque son el receptáculo perfecto para ciertas complicaciones y funciones. Y el tourbillon volante de calibre 2968 es un magnífico ejemplo.
Este CODE es el primer tourbillon volante automático de AP que se presenta en 38 mm, recodando que en 2022 debutó el Royal Oak RD#3 con este mismo calibre en el tamaño “Jumbo” de 39 mm. Y luego apareció en 37 mm. Pero este CODE es el primero en 38.
La jaula del tourbillon volante del Calibre 2968 ha sido meticulosamente elaborada con un enfoque en la elegancia, la armonía y el rendimiento. Basándose en movimientos anteriores de tourbillon volante, el equipo de AP reposicionó los componentes clave e introdujo un nuevo mecanismo de escape que impulsa la jaula de titanio periféricamente. Esta innovación no solo mejora la distribución de energía al tourbillon, sino que también refina y aligera el órgano regulador. El oscilador del escape, con su mayor amplitud, supera los límites de la transferencia de energía, mejorando así la fiabilidad, la eficiencia energética y la precisión, al tiempo que minimiza el riesgo de golpeo, un fenómeno que se produce cuando se transmite un exceso de energía del escape al oscilador.
Más allá de sus avances técnicos, este diseño eleva el atractivo estético del movimiento. Los brazos del volante se han reposicionado y rediseñado para garantizar que la jaula del tourbillon volante quede al ras de la esfera, creando un efecto visual fascinante. Mientras tanto, el fondo de zafiro de la caja revela los puentes en tonos rodio, intrincadamente calados, del movimiento, destacando su elegante simetría y belleza arquitectónica. La decoración del movimiento combina los dinámicos ángulos en V y el clásico acabado de traits tirés, que sustituye al tradicional Côtes de Genève, al tiempo que muestra la masa oscilante de oro rosa de 22 quilates en tono oro arena, que armoniza con el color de la caja para un acabado refinado.
Este bonito CODE 11.59 con tourbillon volante automático se presenta en una elegante caja de Sand Gold, adornada con 235 diamantes talla brillante (aproximadamente 1.2 quilates). Esta aleación de 18 quilates, que combina oro, cobre y paladio, debuta en la colección tras su introducción en el Royal Oak en 2024. El diseño polifacético de la caja y la interacción de los biseles satinados y pulidos realzan el aspecto dinámico del material, que cambia entre oro blanco y rosa según la luz. Los diamantes, cuidadosamente seleccionados por su claridad y color, están tallados en varios tamaños para alinearse perfectamente con la geometría de la caja, creando una composición armoniosa y radiante.
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