Credits: Article and images by Lee Sheng @ Revolution Watch Magazine. See the original article here - https://revolution.watch/mxl/h-moser-cie-el-pioneer-tourbillon-estrena-rostro-en-color-borgona/
H. Moser & Cie. ya es un maestro en la creación de relojes con tonos púrpura y rojo vibrantes. El violeta fumé ha sido protagonista en sus modelos Endeavour, como el Centre Seconds Concept y el Tourbillon Concept “Purple Haze”, así como en el deportivo Streamliner. Incluso utilizó por primera vez una esfera de esmalte grand feu en color púrpura para el minorista de Singapur Sincere Fine Watches, con motivo de su 70.º aniversario.
Sus esferas en rojo fumé son aún más llamativas, generalmente con un rojo intenso similar al de los camiones de bomberos, que se oscurece hacia el borde hasta alcanzar el negro. Esta tonalidad ha sido utilizada en el Pioneer Centre Seconds, el Streamliner Tourbillon y el LM101 en colaboración con MB&F en 2020. (También en aquel reloj de queso suizo, pero bueno, eso es otra historia).
Ahora Moser introduce por primera vez un tono borgoña en su Pioneer Tourbillon, con un efecto ahumado. Aunque pueda parecer un simple cambio estético, este nuevo enfoque cromático refuerza la esencia de la marca: alta relojería con un perfil discreto.
A diferencia del rojo o el rosa, el borgoña no es un color común en la relojería. Su tono más oscuro reduce el efecto llamativo de sus versiones más claras, evocando una elegancia propia de la realeza o de la vieja aristocracia. Para quienes buscan un toque de color sin sacrificar la sofisticación, este tono es el indicado.
Gracias al característico acabado fumé de Moser, con bordes que se oscurecen hasta casi el negro, la esfera logra un efecto enigmático y cautivador. Expresa la sensación de lujo de forma sutil, alejándose de los vistosos diales lacados de colores brillantes.
Aunque Moser ha aplicado el efecto fumé en numerosos modelos, el tono borgoña se siente particularmente efectivo en transmitir esta filosofía. Si bien ya había aparecido en algunos modelos como el Endeavour, es la primera vez que se usa en el Pioneer.
Cabe destacar que el logotipo está renderizado en el mismo color que la esfera, por lo que, a la distancia, el reloj parece no llevar ninguna marca. Quienes conocen a Moser lo identificarán al instante, ya que su lenguaje de diseño se ha convertido en su propia identidad. Un logotipo sutil mantiene la pureza del dial, mientras que uno más evidente sería predecible y restaría a la sensación de lujo discreto.
El Pioneer es, técnicamente, el primer reloj deportivo de Moser, anterior incluso al Streamliner. La diferencia entre ambos es que el Pioneer es un modelo más versátil, con un estilo que equilibra lo deportivo y lo elegante, permitiendo su uso en múltiples ocasiones.
Por lo general, un reloj con tourbillon se reservaría para eventos especiales, pero el Pioneer, con 40 mm de diámetro y 12 mm de grosor, es relativamente compacto y perfectamente apto para el uso diario. Su caja, como es característico en la línea Pioneer, cuenta con una resistencia al agua de 120 metros. ¿Con qué frecuencia se encuentra un tourbillon en una caja con estas especificaciones? Además, el reloj es totalmente luminiscente.
El diseño de la caja también desempeña un papel clave en la fusión de estilo deportivo y elegante. Su silueta es sencilla, pero innegablemente lujosa, con curvas refinadas. Sus laterales presentan un detalle tallado que recuerda a la parrilla de un automóvil, mientras que el material en oro rojo completa su estética sofisticada.
Todos estos elementos de la caja y la esfera son impresionantes, pero el reloj no sería igual sin el tourbillon, que añade dinamismo al dial y un atractivo técnico fascinante. Aunque los tourbillons volantes son bastante comunes hoy en día, este es diferente.
A pesar de los cambios estéticos, Moser no ha hecho concesiones con su tourbillon: sigue presentando su exclusivo sistema de doble espiral. Esta configuración, en la que dos espirales oscilan en direcciones opuestas, cancela las irregularidades en la respiración del muelle y los errores gravitacionales típicos de un espiral único, logrando una oscilación más concéntrica y precisa.
Curiosamente, el tourbillon volante está diseñado como un módulo intercambiable, lo que permite reemplazar la unidad completa con facilidad durante el servicio, ahorrando tiempo y potencialmente mejorando la precisión en comparación con la reparación de un mecanismo desgastado.
El espiral es producido por Precision Engineering AG, empresa hermana de Moser, que también suministra este exclusivo sistema de doble espiral a marcas de alta relojería como el independiente Laurent Ferrier.
En términos mecánicos, el calibre HMC 805 es esencialmente una versión mejorada del HMC 804. Ha sido más esqueletizado para ofrecer una mejor vista de su mecánica. El rotor ahora es prácticamente un marco, y algunos puentes han sido perforados para maximizar la transparencia.
El acabado sigue siendo inconfundiblemente Moser, con un tratamiento preciso que mantiene un aire ligeramente industrial en lugar de una decoración abiertamente tradicional de alta relojería. Sin embargo, sigue siendo un movimiento indudablemente lujoso, gracias al doble rayado en la platina base y los componentes pulidos en negro del tourbillon.
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